CEO de Lone Light House
Para quienes, como Laurent de Thieulloy, están acostumbrados a entenderse con personas de diferentes culturas, países y costumbres, comprender la factura de la luz no resulta la misma quimera que para el consumidor medio. Quizá por eso, y aun reconociendo que el sector energético es en ocasiones indescifrable, este empresario de origen francés sabe interpretar las señales.
Como un explorador de antaño este empedernido viajero al que sus habilidades como comerciante han llevado por todo el mundo, sigue la dirección del viento y, sobre todo, los designios del sol. Convencido de los beneficios de la producción sostenible, está dispuesto a sacarle partido a la estrella más grande de la Vía Láctea porque si en algo cree también Laurent de Thieulloy es en el potencial de la energía verde.
Si a la convicción y a la capacidad para emprender se les añade un toque de romanticismo y un afán por innovar con mucho camino por recorrer, el resultado es Lone Lighthouse, la empresa en la que aquel comerciante que quiere materializar un sueño que hoy parece imposible: lograr que no paguemos ni un euro por la energía que necesitemos. Y Laurent de Thieulloy sabe cómo hacerlo.
PUENTIA: ¿QUÉ ES LONE LIGHTHOUSE Y HASTA DÓNDE QUIERE LLEGAR?
Laurent de Thieulloy: Es una empresa que desde el principio tiene como estrategia llevar dos velocidades. Una actividad diaria sostenida y otra no tan apegada al tiempo porque se relaciona con la experiencia para intervenir en proyectos de mayor tamaño. La idea es colaborar en desarrollos de energías renovables a un alto nivel y que van a largo plazo.
La primera velocidad es la importante. Trata sobre cómo llevar la energía renovable al consumidor final, al industrial o al privado y que tenga un impacto real y social sobre su economía. Para llegar a eso estamos desarrollando el autoconsumo de tal forma que el dueño de la instalación sea totalmente independiente de lo que ocurra en el mercado de la energía. En el futuro terminaremos reduciendo los costes energéticos gracias a los parques renovables, pero eso llevará tiempo. Es importante a nivel social y humano permitir a los consumidores ser autosuficientes y lograr una energía más competitiva. Estamos desarrollando proyectos en Castilla y León, Navarra y Madrid que permitan solucionar las necesidades energéticas de viviendas de protección oficial para que quien viva allí ni siquiera pague factura de energía.
Todo el mundo habla de subvenciones y de aportaciones de dinero, pero no se ve esta parte de la subvención europea a las administraciones para que financien estas instalaciones en edificios públicos y de protección. Aportamos un plus humano y social a la gente menos favorecida porque la energía es fundamental.
Tenemos un objetivo claro. En Castilla y León con nuestros techos solares y con ayuda de la administración, vamos a poder cubrir casi la totalidad de la factura energética de viviendas de protección social combinando las ayudas europeas con el aporte a cargo de la administración de la diferencia de costes respecto a un techo normal.
P: ¿SE ESTÁN COMUNICANDO BIEN LOS BENEFICIOS DE LA ENERGÍA VERDE? ¿HABRÍA QUE PONER MÁS FOCO SOBRE EL RENDIMIENTO PARA EL BOLSILLO?
LDT: Creo que sí. Convendría dejar muy claro quién instala al consumidor final soluciones fotovoltaicas y de qué forma lo hace. El consumidor debe fijarse en que la instalación sea suya en un plazo no superior a 10 años. Es decir, que se instalen soluciones para que la persona que vive bajo esa instalación sea su dueño después de amortizarlo en un plazo de entre 6 y 10 años.
La solución de Lone Lighthouse consiste en una inversión financiada para que la persona en poco tiempo sea la dueña de su instalación. Una vez lo logre, tendrá durante 20 años energía casi gratis.
P: LA TEJA SOLAR SUENA A REVOLUCIÓN
LDT: La teja solar es un producto definitivamente sólido. Le da igual la nieve, el viento, el granizo… No tiene que ver con un módulo, que es más barato, pero también es mucho más frágil. Cuando ves el coste al que está hoy la energía te da que pensar. Está claro que volverá a bajar, pero también volverá a subir. Si bien la teja produce un poco menos que la placa por metro cuadrado, al cubrir todo el espacio posible y quedar totalmente integrada termina siendo más productiva. La teja es un techo de por si impermeable; es más que un producto fotovoltáico.
P: EN EL CASO DE LONE LIGHTHOUSE INNOVACIÓN Y SOSTENIBILIDAD VAN DE LA MANO. ¿HAY MARGEN PARA SEGUIR INNOVANDO?
LDT: Mucho. A pesar de las investigaciones y del afán por encontrar una mayor eficiencia -actualmente del 100 % del sol recibido se aprovecha en torno al 21 %- , todavía no ha dado su salto tecnológico.
Si bien los modelos fotovoltáicas son rentables, la energía fotovoltáica va por detrás de la eólica, que es más eficiente pues tiene la capacidad de producir a todas horas. La fotovoltaica evolucionará. Si se diera un salto tecnológico que permitiera sacarle más partido, tendríamos energía sobrante incluso para revender. La idea es que la energía sea un bien público y su coste sea cero. Es a lo que se debe aspirar. cuando la fotovoltáica mejore su rendimiento, entonces será mejor que la eólica.
P: ES ECONOMISTA ESPECIALIZADO EN COMERCIO INTERNACIONAL. ¿EN QUÉ MOMENTO ENTENDIÓ QUE EL FUTURO ESTABA EN LA ENERGÍA LIMPIA?
LDT: Soy un comerciante que ha trabajado en culturas muy diferentes. He trabajado mucho en Asia y en diferentes ámbitos. Cuando trabajaba para el Grupo Jorge en la industria alimentaria ya apostábamos por la reutilización de recursos. Allí se invertía en eólica. Cuando Fernando Samper se separa de sus hermanos y se queda con la parte de renovables, sabe que se enfrenta a un mundo energético complicado y me pide ayuda para aportarle a Forestalia una visión internacional y un apoyo desde Francia para no depender del todo de España. En enero de 2016 se convirtió en la primera empresa europea en aportar modelos financieros sin subvención alguna.
Me acerqué sin ser especialista en energías renovables. No tenía un conocimiento profundo. Tuve que aprenderlo. Había que dar un salto de conocimiento para saber qué hacer con la idea de que las renovables dejen de costarle dinero a la gente. Había que pagar subvenciones, el impuesto al sol, había que pagar al inversor… Forestalia fue la primera empresa que, con apoyo de la banca, ofreció soluciones. Ahí me formo y lo entiendo, aunque la energía es un mundo desconocido del que aprender a diario.
P: TRAZAR PUENTES Y CONECTAR PAÍSES, ¿ES ESE UN PASO ESENCIAL?
LDT: Eso es. España es el futuro granero de energía renovable de Europa porque sus recursos son enormes. Tiene la oportunidad de ser un gran proveedor de energía renovable y verde para el resto de Europa. Y para eso la interconexión entre países es clave.
P: Y TENER UN OJO PUESTO EN SU PAÍS DE ORIGEN, FRANCIA, TAMBIÉN ES IMPORTANTE HOY EN DÍA EN EL SECTOR ENERGÉTICO
LDT: Sí porque es necesario saber qué pasa con el parque nuclear francés. Francia es gran productor de energía nuclear. Si limitas la potencia nuclear y baja su producción, tendremos problemas porque impacta directamente sobre el sistema energético europeo. En Francia hay mucha lucha contra las renovables. Se ha cerrado una central y cuatro tienen problemas. Por eso sube el precio. Francia va a ser menos exportadora y cada vez más compradora. Lo que me cuesta entender es que se diga que la nuclear es verde.
P: ESPAÑA ES EL SEXTO PAÍS CON MÁS HORAS DE SOL POR AÑO. ¿QUÉ TAL SE ESTÁN HACIENDO AQUÍ LAS COSAS?
LDT: España lo está haciendo bien. La energía no tiene color político y España está aplicando el sentido común. Tanto en viento como en sol tiene dos grandes recursos energéticos. El país con más extensión de tierra y suministro es imbatible. Son grandes recursos. España es un país de energías renovables. Haciendo esto, España se vuelve estratégicamente independiente del gas, del petróleo o del carbón de antaño. Está desarrollando su propia energía. Tiene tecnología, espacio y recursos y, a medio plazo, debería ser un exportador de renovables. Vuelvo a insistir en que debería ser el gran proveedor de energías renovables de Europa.
P: TEJAS SOLARES, PANELES SOLARES FLOTANTES, MÓDULOS SOLARES, AGRICULTURA FOTOVOLTAICA… ¿CUÁNTOS AÑOS FALTAN PARA QUE SEA ALGO COMÚN?
LDT: Pocos. Los paneles solares flotantes son el ejemplo. Estamos en contacto con comunidades de regantes para producir energía en sus canales, alimentar sus estaciones de bombeo, abaratar y proteger el agua. Producimos energía y protegemos el agua. Eso está cada vez más cerca. No es una tecnología compleja siempre que la superficie sea pequeña porque necesita un buen anclaje y se compromete en superficies grandes. La ‘agrienergía’ tiene todo el sentido del mundo. Disponemos de una tecnología que permite recuperar el agua que se forma sobre los paneles y favorecer la agricultura horizontal poniendo arriba del todo a los captadores fotovoltaicos que generen la energía suficiente para el mantenimiento. Lo veremos cada vez más a lo largo de este año y en 2023 porque los costes se abaratan mucho y es un buen modelo que vamos a lanzar ahora.
La tecnología solar flotante leles ayuda a disponer de su propia energía para que no dependan tanto de un sistema variable.
P: ¿ALGÚN TERRITORIO MÁS PROPICIO PARA ESTE TIPO DE DESARROLLOS?
LDT: Estamos trabajando mucho en Andalucía, pero todas las zonas de España propicias para acoger energía fotovoltáica tienen mucho futuro en este sentido.
P: ¿EN QUÉ MEDIDA SON DETERMINANTES LOS PUENTES ENTRE EMPRESA PRIVADA E INSTITUCIONES PÚBLICAS PARA QUE LA ENERGÍA SOLAR DEJE DE SONAR A ALGO EXCLUSIVO?
LDT: Son absolutamente fundamentales. La administración tiene acceso a fondos europeos que pueden ayudar al inversor privado, vía subvenciones, a entrar en la producción de energías renovables de autoconsumo y, por tanto, la gestión de esos fondos es importante.
P: ¿CUÁNTO SE TARDA EN AMORTIZAR UNA INVERSIÓN EN ENERGÍAS LIMPIAS?
LDT: Antes de la subida de la luz eran 10 años; tres años más que el módulo. Con las nuevas tarifas, pueden ser 6 o 7 años. Con la energía más cara es más rápido el retorno. La gente mira por la inversión. Pero, ojo, con la perspectiva de tener tu propia energía. No olvidemos que lo fundamental es la producción de energía. El mismo tejado solar puede optimizar la rentabilidad o te puede llevar a montar un sistema para convertirte en vendedor de tu excedente.
P: ¿DEBEMOS TEMER UNA NORMATIVA QUE, COMO EN EL PASADO, PENALICE EL AUTOCONSUMO?
LDT: No sé si hoy en día, en una política global europea, un país se puede permitir salirse del camino y cargar de impuestos a los habitantes. Hoy el coste por kilómetro eléctrico es mucho más bajo que los demás. Los hidrocarburos van cargados de impuestos. ¿Qué pasara con los impuestos? Pues con la generación eléctrica podrían darse, pero no veo posible que sea retroactivo. Los gobiernos se buscarán el camino. La energía tiene esta sombra, pero si nos volvemos un gran productor de coste bajo seguirá siendo más competitivo, aunque haya impuestos.
P: HABLARÍAMOS DE LA ENERGÍA COMO UN BIEN PÚBLICO
LDT: Efectivamente. Igual que como ciudadano tienes derecho a una sanidad gratis, también debes tener derecho a una energía gratis. Dentro de un marco. lógicamente, pero se debe lograr que cualquier persona tenga acceso a la energía con independencia de su poder adquisitivo. Los estados, y más en los países occidentales, debe usar su riqueza para que la energía sea un bien público. Que todo el mundo tenga el mismo acceso a la energía que a la sanidad o al agua.
P: ¿ES LA ENERGÍA NUCLEAR LA ÚNICA RESPUESTA A UNA EMERGENCIA ENERGÉTICA?
LDT: Hoy en día es necesaria. Si hablamos de los reactores actuales, la fuerza del nuclear (la fisión) es su estabilidad y ayudaría a mitigar esos apagones de los que tanto se habla. Estoy a favor de la nuclear mientras sea necesaria para garantizar el mix energético y evitar esos problemas. Sin energía nuclear hoy por hoy pasaríamos varias horas al día sin luz. Mientras no haya soluciones definitivas y competitivas de almacenamiento, es necesaria.
P: ¿ENTIENDE EL GRAN PÚBLICO LO QUE SUCEDE CON LA SUBIDA DEL PRECIO DE LA LUZ?
LDT: Al consumidor final siempre le es muy complicado entenderlo porque la factura es compleja. Incluye gastos de transporte, diferentes impuestos, coste energético en origen… y entender el impacto del mercado global es complicado. En el mercado industrial el megavatio está por debajo, pero el impacto es tan grande que hay industrias que no pueden trabajar porque pierden dinero. Las industrias que pagan un 100 % más por la energía inevitablemente lo van a repercutir y por eso también el consumidor paga por otros lados el precio de la luz. Una de las formas de beneficiar a unos y otros es generar energía previamente. El aspecto humano y social de la energía es un vector fundamental para Lone Lighthouse. Por eso también ofrecemos grupos electrógenos que se pueden montar en cualquier lado de una forma rápida y sencilla.