Bidafarma, una historia de éxito

Detrás del mostrador de su farmacia de la localidad sevillana de Torreblanca Antonio Pérez Ostos (Écjija, 1964) es uno más de los miles de farmacéuticos españoles. Esos que, de forma más bien callada, han jugado un papel esencial durante la pandemia.

Pero en cuanto Antonio cuelga en la percha su ropa de trabajo deja paso al experto en marketing y alta dirección de empresas que preside Bidafarma, una de las grandes cooperativas españolas de distribución farmacéutica que, desde su nacimiento en 2016, da servicio a 10.000 oficinas de farmacia y sigue cerrando ejercicios en positivo pese a las circunstancias. Como rezaba uno de los lemas de la peor época de la pandemia: Juntos, más fuertes. Y así sucede en un colectivo que agrupa a una docena de entidades, algunas de una solera casi centenaria.

Trabajar en una farmacia te convierte en prescriptor, psicólogo y hasta en líder moral de muchas personas. Quizá por eso a Pérez Ostos le resulte natural un camino vital plagado de responsabilidad, pues también es vicepresidente de Grupo Bidafarma y de la Junta Directiva de la Federación de la Distribución Farmacéutica, además de formar parte del Consejo Empresarial de la Confederación de Empresarios de Andalucía y de la Comisión Nacional de Sanidad y Asuntos Sociales de la CEOE.

Pérez Ostos conoce como nadie las bambalinas de su oficio pues a lo largo de su trayectoria ha estado en muchas otras ocasiones en el lugar donde se toman las decisiones importantes. Sucedió cuando era presidente de Cecofar o de Unycop, una de las grandes empresas dedicadas a la fabricación de software farmacéutico y como segundo de a bordo en la Asociación de Cooperativas Farmacéuticas y consejero de Grupo Banco Camino – Bancofar  y en la asociación para la promoción de la asistencia farmacéutica. Nadie niega a estas alturas que estamos ante uno de los grandes gestores de la industria farmacéutica española.

 

En un contexto de incertidumbre como el que hemos vivido en estos dos últimos años permítanme subrayar el valor de la distribución farmacéutica en general y destacar la labor de Bidafarma con la farmacia, las administraciones públicas y los colectivos más vulnerables. Es preciso recordar que la distribución farmacéutica no transporta mercancía sino la salud de las personas. Pero, ¿cómo nació Bidafarma?

El próximo mes de julio se cumplirán seis años de su creación como resultado de la fusión de doce cooperativas de distribución farmacéutica que dio lugar a un nuevo ‘gigante nacional’, como lo calificó la prensa por aquel entonces.

El proyecto supuso un hito no solo en el sector sino en todo el cooperativismo nacional ya que, nunca hasta la fecha, tantas cooperativas habían unido sus fuerzas en un proyecto de semejantes dimensiones. Gracias a esta gran fusión conseguimos crear una gran cooperativa fuerte, unida y de cobertura nacional que da servicio a más de 10.000 farmacias en prácticamente todo el territorio nacional a través de los 29 almacenes distribuidos por toda la geografía española y más de 600 rutas de distribución.

A través de nuestros centros logísticos ponemos a disposición de las farmacias más de 40.000 referencias distintas entre especialidades farmacéuticas, parafarmacia y otros artículos de salud. La integración de las doce cooperativas ha conseguido la fortaleza, solidez y tamaño para colocarse en la mejor posición para afrontar con las máximas garantías los desafíos del sector farmacéutico.

Pero no intentábamos ser más grandes sin más. Lo que buscamos desde el inicio es apoyar con mucha más fuerza un modelo sanitario desde la farmacia a través de una cooperativa fuerte y sólida con gran capacidad financiera, comercial, etc. Así, Bidafarma participa en empresas de diferentes sectores y tiene representación en varios Consejos de Administración. Es el caso de Unycop, una empresa que facilita software de gestión a las farmacias; Bancofar, un banco especializado en el mercado farmacéutico o Acofar, un laboratorio farmacéutico encargado de fabricar la marca propia de la distribución cooperativa.

Una amplia experiencia en el sector de la distribución farmacéutica como garantes del medicamento nos permitió crear una cooperativa fuerte y sólida en un sector excesivamente atomizado. De esta forma, conseguimos anticiparnos a un futuro en el que serán necesarias sinergias que ayuden a ser sostenibles a todos los actores involucrados en el sector de la salud.

Bidafarma propone, por tanto, un modelo solidario y cooperativo que ayude a cohesionar todos los territorios y a garantizar el acceso universal al medicamento, algo que pensamos que hay que defender. Consideramos esencial el servicio, la cercanía con nuestros socios y mantener con ellos relaciones responsables, leales y solidarias.

Hoy Bidafarma ya es una referencia en la distribución farmacéutica en España. Su nacimiento supuso un cambio de modelo en las empresas de nuestro sector, pero no por el tamaño sino porque uno de nuestros principios irrenunciables ha sido el de mantener en todo momento la cercanía con nuestros socios.

Somos una distribuidora con mente farmacéutica cuya génesis procede de lo más profundo de las reboticas y, por tanto, planificamos un futuro desde una visión profesional, de sostenibilidad y desde las necesidades de las farmacias que garanticen el actual modelo de proximidad al paciente. Este es fundamento imprescindible y decisivo para entender cómo queremos evolucionar y desarrollarnos como empresa.

Nuestro objetivo primordial ha sido el de consolidar un modelo de farmacia eficiente capaz de aportar valor a la farmacia y, por ende, al ciudadano. No olvidemos que nuestra actividad principal es garantizar que el medicamento llegue a diario a las 10.000 oficinas de farmacia a las que abastecemos, para que este llegue al usuario final (y principal): el paciente. Bajo esta premisa, y superando una situación excepcional como la vivida con la pandemia, nuestro reto principal ha sido en todo momento, el de asegurar el acceso al medicamento sin interrupciones, un hándicap que hemos superado con creces gracias a nuestra previsión y coordinación con los laboratorios farmacéuticos. Podemos afirmar que a ningún paciente le ha faltado su tratamiento durante la pandemia.

A pesar de los envites de la Covid, desde Bidafarma hemos seguido avanzando en el cumplimiento de nuestro plan estratégico consolidando las sinergias previstas entre almacenes, equipos y procesos y estableciendo alianzas estratégicas con otras empresas del sector, de especial relevancia para la realidad cotidiana de la farmacia.

La clave del éxito de Bidafarma radica en nuestra competitividad y en ofrecer a nuestros socios un servicio integral para ayudar a los farmacéuticos en su día a día. Ellos, como socios de la cooperativa, son los propietarios de su canal de suministro, lo que garantiza la independencia de su ejercicio como profesionales sanitarios, quedando libre de posibles presiones de agentes de la cadena de valor del medicamento.

De forma paralela a la creación de Bidafarma también se creó Grupo Bidafarma, un colectivo cooperativo de segundo grado integrado por Apotecaris, Cofarca, Cofarte y Bidafarma, con cobertura nacional y que logra dar servicio a 12.500 farmacias.

Durante los primeros años del proceso de fusión se ha llevado a cabo una etapa de integración y consolidación de estructuras, sistemas, procesos y rutas que nos han permitido aprovechar al máximo las sinergias previstas por la fusión, optimizando procesos y la red de instalaciones logísticas.

Todos estos pasos no hubiesen sido posibles sin la confianza depositada por los socios en el proyecto y el enorme esfuerzo realizado por los trabajadores de la cooperativa, que han demostrado su solidaridad en una operación sin precedentes dejando de lado intereses individuales en pro de un beneficio general.

Antonio Pérez Ostos

Presidente de Bidafarma